Recientemente, en el centro de uno de los glaciares más fríos y peligrosos de Suiza, se encontró algo que ha cautivado el corazón de cientos de miles de personas alrededor del mundo.
Fueron encontrados después de 75 años, los cadáveres de una pareja que en 1942 quedaron atrapados en ese glaciar, desapareciendo sin dejar huella.
Se trata de Marcelin y Francine Dumoulin, amorosos padres de 7 hijos, quienes quedaron huérfanos después de esa trágica noche en los alpes helvéticos.
Comenta la hija menor, y única sobreviviente, a los 79 años de edad: ¨Nunca dejamos de buscarlos. Muchos de mis hermanos murieron deseando saber qué fue lo que pasó con mis papás. Hoy me encantaría que estuvieran aquí para que conmigo descubrieran la verdad, y así puedan descansar tranquilos.
No cabe duda que Dios recompensa a los que no perdemos la fe¨.
¨Siempre soñamos con darles ese funeral que se merecían, y hoy, después de 75 años, ese sueño se hará realidad.
En nombre de mis hermanos que murieron con esa terrible duda¨.
Después de muchos años de incertidumbre, hoy los hijos de los Dumoulin descubrieron exactamente qué fue lo que sucedió aquella tarde en la que sus padres no regresaron a casa: ¨Cayeron en las garras de la fría noche que terminó por llevarlos al desolado camino de la muerte, pero al final murieron juntos, amándose como siempre lo hicieron¨ - Comentó la hija menor, la Sra. Udry-Dumoulin.
Fue un trabajador de la empresa Glacier 3000, quién operaba maquinaria para retirar hielo, el que descubrió los cadáveres.
Inmediatamente supo que se trataba de cuerpos de más de 70 años de antigüedad, pues a jugar por su ropa, datan de la Segunda Guerra Mundial.
Para Marceline Udry-Dumoulin, haber encontrado los cuerpos de sus padres es un gran alivio, pues no podía hacerse a la idea de morir sin saber qué fue lo que sucedió con ellos. Hoy se dice contenta, pues sabe que a pesar de lo trágica que fue la muerte de sus amados padres, al final y en todo momento, siempre mantuvieron juntos.
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